Por Ignacio Andreatta, periodista y CM de G&M News.
Jugador, Life Coach, Manager, Brand Manager y Country Manager. Has pasado por todas las etapas en una estructura de equipo de Esports. ¿Cuáles han sido tus aprendizajes a lo largo de todo este proceso?
Fue un reto bastante grande. Dejé mi rol como jugador profesional de League of Legends, y luego Infinity me dio el cargo de Country Manager, pero no sabía cómo empezar. Así, lo primero que hice fue realizar un estudio de mercado y me di cuenta de que lo que más se consumía en el Perú era DotA. Entonces, les presente la propuesta a los inversionistas de Infinity y, por suerte, se aprobó para la creación del equipo de este juego. Hoy, ya estamos peleando por un lugar en el Major de Lima. Nuestro principal objetivo es lograr participar en el Major.
¿Cómo describirías la importancia de Infinity a nivel latinoamericano, y qué peso tiene puntualmente en Perú?
Somos uno de los mejores equipos de LatAm, top 3 o 4. En todos los Esports que representamos, siempre apuntamos al top 3. Siento que, como organización, hemos creado muchas experiencias a partir de nuestros buenos resultados. Por ejemplo, fuimos el primer equipo de LatAm en ganarle a un conjunto asiático en League of Legends en un evento internacional de Riot. Buscamos la excelencia deportiva, y ser referentes a nivel latinoamericano.
Dentro de los distintos juegos, vamos a enfocarnos en DotA. ¿Por qué crees que es una de las disciplinas favoritas de los gamers peruanos?
Creo que, en Perú, hay una ‘cultura Dotera’ que inició desde hace mucho. Incluso yo mismo fui parte de ella. Cuando estaba en el colegio, tenía el hobby de salir e ir con mis amigos a jugar Starcraft, DotA y Counter-Strike. Creo que es una preferencia de los peruanos. Fue el primer MOBA a nivel mundial, no requería de una computadora super potente y, entonces, la mayoría de la gente que acudía a las cabinas de Internet podía jugar DotA tranquilamente. Es un juego que se viene consumiendo aquí desde hace unos 10 a 12 años. Es lógico que Perú sea uno de los países con mejores resultados a nivel mundial en esta disciplina. Ver el Major en Lima este año da una idea de la relación del Perú con el DotA. Cuando yo me inicié, el máximo referente era Beastcoast (organización de Estados Unidos). Incluso sin mucho apoyo, logró estar en el top 8 en el TI 2018. Año tras año, Perú se ha ido superando, llegando a ver equipos como EG y Alliance apostando por LatAm.
Precisamente, una noticia clave es que Perú será la sede del primer evento oficial de DotA 2 en Sudamérica con el Major de Lima, a disputarse entre febrero y marzo de 2023. ¿Qué representa este logro para el país y para la región?
Creo que el Major en Lima representa que tanto la desarrolladora Valve como el mundo en general han visto al DotA peruano y aprobado su crecimiento deportivo. Si me hubieras hablado de esto hace unos tres años, habría sido un meme decir que se haría un Major en Lima, y hoy es una realidad: vamos a recibir a los mejores equipos del mundo y eso ya es increíble.
A nivel de equipo, Infinity decidió invertir fuerte en su team de DotA 2, con nuevos nombres en su roster para esta temporada y hasta la presentación de una nueva Gaming House en Perú. ¿Cuál es tu mirada sobre estos importantes pasos?
Cuando decidí ingresar a DotA, el dueño me planteó dos posibilidades. La primera era comprar un equipo competitivo y ahorrar tiempo. En ese entonces, los equipos nos pedían una suma bastante elevada. Al ver eso, optamos por la otra posibilidad y decidimos tomar el camino difícil: formar nuestro propio equipo, aun sabiendo que eso llevaría mucho tiempo y recursos. En 2020, en nuestro primer ingreso a la escena, acumulamos experiencia y luego, en 2021, apostamos por sangre nueva a partir de efectuar nuestro primer bootcamp. Ya en 2022, hicimos una mayor inversión, pero no contratamos un roster Tier 1, si no que fuimos mezclando entre rookies y jugadores con experiencia. Desde este año 2023, buscamos a los mejores jugadores, y tuvimos la suerte de formar un equipo que puede pelear el top 3 de LatAm y el top 8 a 10 del mundo.
¿Cómo es un día normal del equipo cuando están en competencia? ¿Cómo se diferencia eso de la etapa previa a los torneos?
Después de mis 3 años de experiencia, considero que, en DotA, el objetivo principal es que el estado mental de los jugadores sea el mejor posible. La regla es que los chicos se despierten antes de las 12 del mediodía. El scouting se hace el día antes. Nos cuidamos con el almuerzo y en todo lo que tenga que ver con el estado mental de los jugadores. En un día normal, el jugador se levanta, desayuna, almuerza a las 14:00 horas. Si hay actividad grupal u otra actividad 1-1, el coach se va con ellos, juegan ranked o ven competitivos. Las scrims (partida entre equipos de Esports, fuera de competición, con el fin de entrenar y probar nuevas tácticas) empiezan a la tarde hasta entrada a la noche. A las 19:00 se hace un análisis y desde las 21:00 pueden tener libre o, si lo consideran, pueden seguir practicando.
¿Cuál es tu opinión sobre el estado actual del gaming latinoamericano, en base a sus éxitos y sus carencias?
En mis inicios, se competía por un premio de sólo US$50 o por un mouse. Hoy, la industria ha evolucionado exponencialmente; nunca se ha detenido. El nivel latinoamericano siempre fue alto, pero los equipos carecían de recursos. En este momento, ya estamos sentando las bases para los Esports. Nadie es ajeno a un pro player; la sociedad se lo toma más en serio. Cuando empecé, me llevaban al psicólogo por pasar mucho tiempo en la computadora. Hoy, LatAm está creciendo enormemente, y desde afuera ven nuestro potencial, así que creo que es cuestión de tiempo dar saltos grandes y obtener mejores resultados. Esto sucede en DotA, Valorant y Counter-Strike. Ojalá que algún equipo de LatAm gane pronto un Mundial.
Considerando que existe un numeroso público seguidor de la actividad en LatAm mayor de 28 o 29 años, ¿cómo ves la creciente tendencia a las apuestas en los Esports? ¿Piensas que favorecerá o afectará el progreso de este deporte?
Hablando de DotA específicamente, el tema de las apuestas ha sido controversial por el famoso 322 (es una práctica en DotA 2 por la cual un jugador o equipo apuesta en contra de su team y se deja ganar para cobrar el premio de la apuesta). Hoy en día, en Perú, hay organizaciones que pueden ser equipos muy buenos, pero que, a veces, recurren al 322. A mi entender, las apuestan benefician a la escena, tanto al juego como a los equipos. De hecho, hay casas de apuestas que invierten muchísimo en la escena del DotA. Con una buena regulación, no debería haber ningún inconveniente.
¿Cuáles son los objetivos del team DotA Perú de Infinity para este 2023?
Lo primero es posicionarnos como equipo Tier 1 y ser top 3 en LatAm. Queremos participar en todos los Major del año y sentar las bases para 2024, porque este año no llegamos a contratar un stack como 5. Tenemos un roster increíble, pero todavía nos falta un poco. Crecer con el equipo actual es una de las cosas que más nos motivan.