Por Alejandro Caminos, periodista, guionista y colaborador de G&M News.
El paso del tiempo trae consigo muchísimos cambios, desde la aparición de nuevas tecnologías, que cada vez influyen más en nuestro quehacer diario, hasta novedosos hábitos de consumo. Por supuesto, los valores e ideas de una sociedad no son ajenos a este aggiornamento. En este sentido, un fenómeno clave viene siendo la progresiva ampliación de derechos y espacios de sectores minoritarios que la integran.
Al respecto, sin dudas, se destaca la lucha permanente que lleva a cabo el colectivo LGBTTTI+, que tiene su reconocimiento durante todo el mes de junio, llamado el ‘Mes del Orgullo’. Para celebrar el acontecimiento, en G&M News, repasamos los personajes que integran este movimiento y que marcaron un antes y un después en la historia de los videojuegos.
HACIENDO HISTORIA
En 1988, el mundo ya conocía sobremanera a Nintendo, desarrolladora que revolucionó la industria con el título Super Mario Bros. El fontanero más popular ya había entrado en el inconsciente colectivo y, ante semejante éxito, la firma japonesa dio luz verde para la realización de Super Mario USA, también conocido como Super Mario 2. Se sabe que el producto estaba basado (o mejor dicho, ‘reprogramado’) en el juego Yume Kōjō: Doki Doki Panic! Su aceptación fue tan grande que vendió más de 10 millones de copias.
A pesar de mostrar nuevas mecánicas, como niveles verticales y la opción de elegir entre cuatro personajes, el juego tenía una gran particularidad, que resaltó en aquel entonces. Uno de los antagonistas era Birdo, una criatura antropomorfa de color rosa, con la habilidad de generar y lanzar huevos. Si bien su nombre era de denominación masculina, en el manual original del videojuego, decía que se identificaba como una chica, por lo cual prefería que la llamaran ‘Birdetta’. Así, para muchos, se trató del primer personaje transgénero en la historia de los videojuegos. Incluso, tuvo varias ediciones de doblaje, desde voces femeninas agudas o graves hasta neutrales, que no reflejaran ninguna característica humana referida a un sexo determinado. Su legado fue tal que aún hoy aparece en varios juegos de Mario Bros.
TIEMPOS MODERNOS
En años más recientes, se sucedieron otros casos que también dejaron su huella. En 2013, con el dominio de la consola PlayStation 3, el clamor popular estaba direccionado a The Last of Us. El juego tuvo su DLC (contenido descargable), titulado Left Behind, que giraba en torno a Ellie. Allí se nos presenta el beso entre ella y su amiga Riley, una escena emblemática en medio del contexto del caos que supone el juego desarrollado por Naughty Dog. Hay que destacar que el personaje de Ellie fue interpretado por Elliot Page (actor previamente conocido como Ellen Page).
Por otro lado, un juego que resultó una sorpresa en su momento para la escena de los Esports fue Overwatch. Su estética colorida y frenética, con personajes bien definidos, movió al asombro y al interés en una categoría tan difícil como el shooter. Su éxito desembocó en la publicación de cómics, que ampliaron la historia de cada uno de sus personajes. Allí se revela la orientación sexual de Lena Oxton, mejor conocida como Tracer, una de las cámaras visibles del game. En la misma línea (y género) que Overwatch, también Apex Legends apostó por la inclusión. En su catálogo de tiradores, la empresa Respawn Entertainment decidió presentar una gran variedad de héroes, mostrando sus técnicas o habilidades, así como sus diversas sexualidades y etnias. Entre ellos, el jugador puede elegir a Gibraltar (personaje abiertamente homosexual) o a Bloodhound (género no binario).
Con respecto a las desarrolladoras de videojuegos, Bioware es definitivamente uno de los estudios que más hizo para la inclusión de personajes no heteronormativos. Una de sus obras más aclamadas es Dragon Age: Inquisition, donde aparece el mago Dorian Pavus, del Imperio de Tevinter. Asimismo, está Krem, hombre transgénero y segundo al mando de un grupo de mercenarios. De hecho, para su creación, la compañía consultó a distintas personas del colectivo para tener sumo cuidado a la hora de su diseño.
El combate por el reconocimiento y la visibilidad es largo, en una sociedad en constante evolución. Los videojuegos son un fiel reflejo de ello, y constituyen un espacio donde es fundamental la ampliación de la presencia de los colectivos. Porque el gaming no sólo implica juego, sino también compromiso e inclusión.
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