Por Cecilia García, periodista de G&M News.
La ciudad de Callao, sobre la costa del Pacífico, a doce kilómetros de Lima, en Perú, vio crecer a Lila Mariella Luque Cáceres. De pequeña, solía dibujar las carátulas para sus compañeras de colegio. “Mi primera carrera fue Dirección de Artes Gráficas y Diseño, en la Universidad Peruana de Arte Orval. La elegí por el tema creativo, pero también pensando en que mi familia pasaba momentos económicos difíciles, y que los estudios técnicos me podrían llevar a trabajar cuanto antes”, rememora.
DETERMINADA Y CON PERFIL DE LIDERAZGO
Con la determinación que la caracteriza, a los 18 años, consiguió su primer empleo y, desde entonces, ha pasado por prensa, editorial, plataformas digitales y desarrollo de webs. “Aprendí a crear, a diseñar y también me gustó mucho Front End y UX”, cuenta. A medida que avanzaba en su carrera profesional, llegó el momento en que Mariella no sólo quiso ser parte de la ejecución de una campaña, sino también la responsable de crearla y dirigirla. Así, decidió hacer una especialización en Marketing en Centrum Católica (Centro de Negocios de la Pontificia Universidad Católica de Perú), en la Universidad de Lima, y luego, en la Universidad San Ignacio de Loyola (USIL).
Hace seis meses, entró a trabajar a Meridianbet Perú, donde hoy es la Jefa de Marketing de esta destacada firma de iGaming. Ella lidera la estrategia y desarrolla, junto con su equipo, distintos proyectos para atraer a los usuarios. “El core de Meridianbet y Meridian Casino es el online. Tengo fascinación por este mundo que pone todo al alcance de tu mano a sólo un clic, estés donde estés. Creo que las plataformas son una gran opción de entretenimiento”, reflexiona.
ORGANIZACIÓN Y BUEN HUMOR
Como ella misma suele decir, se enamora de rubros poco convencionales. Antes del juego, Mariella trabajó en el automovilismo para el Dakar y en el sector de los deportes acuáticos, ambientes también tradicionalmente masculinos. “No he sentido discriminación en el gaming, pese a venir de otros sectores. Recuerda las caras de asombro de algunos cuando me presentaba como la organizadora de un evento, porque esperaban que hubiera allí un hombre a cargo”, comenta con una sonrisa.
Precisamente, su buen humor es uno de sus rasgos distintivos y le sirve para poder manejar la presión y encontrar soluciones a los problemas que se presentan. “No me quedo con la primera idea. Soy alguien que sabe reír, trabajar mucho y ser detallista con las amistades y los clientes”, se autodefine.
FLEXIBILIDAD Y DISFRUTE DE NUEVOS PROYECTOS
La modalidad de trabajo híbrido que sobrevino con la pandemia le permitió disfrutar más de su familia y del confort de trabajar en casa, acompañada de una buena taza de café. Además, ha podido intercalar lo laboral con su habilidad para el dibujo y la pintura, dos actividades que le apasionan. Piensa que sería interesante sostener esa flexibilidad en la profesión, siempre que no se descuiden las metas y el crecimiento del negocio.
Para el futuro, Mariella se propone ser ciudadana del mundo. “Espero poder trabajar desde distintos lugares. Me queda mucho por conocer; seguir progresando, disfrutando de proyectos y logrando el reconocimiento con equipos que me aporten aprendizaje”, finaliza.
En una línea
Un libro: “Alicia en el País de las Maravillas” (Lewis Carroll, 1865)
Una película: “Orgullo y prejuicio” (Joe Wright, 2005)
Música preferida: pop y clásico (‘Para Elisa’, de Ludwig van Beethoven)
Un perfume: Cool Water, by Davidoff
Un lugar para vivir: el campo
Un lugar para veranear: la playa o la sierra peruana
Un lugar para comer: San Antonio
Una comida: dulces, pastel de choclo y makis (arrollados de arroz que se acompañan con distintas variedades de pescado, típicos de la cocina japonesa)
Una bebida: limonada de hierbabuena
Un deporte: caminar
Un/a maestro/a o referente: la Madre Teresa de Calcut