Por Alejandro Caminos, periodista, guionista y colaborador de G&M News.
Llevas 14 años con el poker. ¿Recuerdas cómo fueron tus inicios?
Comencé en 2006 cuando empezaban a dar el World Poker Tour (WPT) en televisión y aparecían los primeros videos en YouTube. Un día, un amigo del grupo del colegio dijo de jugar e hicimos la primera partida en su casa con su padre. A partir de ahí, jugamos varias veces por semana. Recuerdo que empecé perdiendo, lo que encendió la llama dentro de mí para aprender y ganar. Luego, dos años después, en 2008, participé en mi primer torneo oficial. Tenía 18 años recién cumplidos. ¡De hecho, quería cumplir la mayoría de edad para poder entrar a los casinos! Fue en el Cercle Wagram, un club de poker en Paris, cerca de los Campos Elíseos. Sin dudas, fue uno de los establecimientos más bonitos y con más clase de los que he estado. El torneo fue un freezeout de 60 euros con una treintena de personas. Tengo recuerdos increíbles. Todo era nuevo y emocionante para mí.
¿De qué forma siguió y evolucionó tu juego?
La evolución se dio con mi primer depósito online. A partir de ahí, empecé a jugar mucho más volumen y más manos. Además, mejoré mis razonamientos y comencé a leer y ver videos. En esa época, me ayudó tener amigos inteligentes de la Universidad que también jugaban. Entre nosotros, intercambiábamos ideas, estrategias, análisis y alguna que otra lloradera. Rápidamente, me puse a jugar cash games, que es lo que realmente he hecho los últimos años. Es por eso que valoro mucho la libertad que te da poder levantarte cuando tú desees. Así, bien descansado, el buen juego se ve siempre recompensado. En ese sentido, los torneos son crueles porque puedes jugar óptimo durante horas y aun así perder dinero.
¿Cómo fue la idea que activó el proceso para fundar el poker room en el Hotel Hilton en Panamá?
Cuando tenía 17 años, y en pleno boom del poker, jugaba muchas partidas en mi casa con invitados de mi edad. Fue ahí con mis amigos que empezamos a soñar con tener nuestra propia sala de poker. En 2017, y por absoluta casualidad, aterricé en Panamá para lanzar un emprendimiento y descubrí una manera totalmente diferente a Europa de gestionar y abrir un negocio de poker. El primer año, estuve trabajando en el emprendimiento, así que no pensaba en eso. Luego, volví a jugar en vivo, conocer gente, ganarme buena reputación, entender dinámicas, escuchar opiniones y visualizar mucho mejor todas las dimensiones del negocio. Entonces, en marzo de 2019, se alinearon los planetas. En lo personal, sabía que el StarBay Casino del Hotel Hilton no tenía poker. Es el establecimiento de juego mejor localizado de la Ciudad de Panamá. Está en la avenida principal de la ciudad (Avenida Balboa), en el paseo marítimo (Cinta Costera) y rodeado de oficinas y apartamentos de alto nivel. Además, en el casino, hacen un excelente trabajo de promoción. El establecimiento incluye bares, restaurantes, discoteca, sala de baile, además de máquinas tragamonedas y todos los juegos clásicos de casino. La sala siempre asegura un buen flujo de público. A través de un contacto, conseguí conversar con el Subdirector. Luego, tuve una reunión con la Gerencia Senior y les presenté un plan de negocios completo. Tuve la inmensa suerte de que uno de mis mejores amigos, ex dealer del Casino Barcelona, me acompañó como socio. Seguimos teniendo encuentros con el casino hasta que llegamos a un acuerdo económico.
Como promotor y organizador de torneos de poker, ¿cómo se hace para lidiar con el ego de los jugadores a la hora de coordinar un evento?
Al ser yo también jugador, lo más importante es la empatía. Lo digo desde la experiencia propia. Además, como cliente, soy muy exigente, y aprendí a tratar a la gente como me gustaría que me trataran a mí. Hay que tener un balance entre simpatía, paciencia y rigor. Los jugadores te respetarán si haces cumplir las reglas; eres ordenado, lógico y consecuente con el reglamento. Debes mostrar que eres justo con todo el mundo, sin tratos preferenciales. Si combinas todo esto con una sonrisa, un excelente trato y una buena dosis de paciencia, los torneos se desarrollarán perfectamente.
¿Hay alguna anécdota puntual, divertida o curiosa de algún lugar en el que hayas estado y puedas compartir con nuestros lectores?
Soy un apasionado del básquet y de la NBA. El primer partido en vivo que vi de un equipo de la NBA fue un amistoso entre Oklahoma City Thunder y FC Barcelona, en la ciudad catalana. Gracias a un contacto, tuve un asiento muy cerca de los jugadores y pude disfrutar de un gran espectáculo, especialmente, observar a Russell Westbrook en directo. Luego del partido, fuimos a cenar y, por la noche, bajé al casino. Al sentarme en la mesa, ¡ahí estaba delante mío el mismísimo Westbrook!
¿Qué rol tiene Panamá en el contexto del poker centroamericano?
Panamá ocupa un lugar protagónico por varias razones. La primera: es uno de los líderes económicos de Centroamérica; la segunda mayor economía en PIB por habitante detrás de Chile y tiene el segundo mayor salario medio detrás de Costa Rica. Además, muchas de las personas acaudaladas que se instalan en Panamá por negocios o motivos fiscales son los clientes potenciales que dan vida al poker. Así que, de manera natural, Panamá tiene más volumen de poker. Como complemento a la primera observación, el segundo motivo es que, en la Ciudad de Panamá, hay varias personas y establecimientos que, a lo largo de los años, han dedicado muchos esfuerzos a este negocio. Gracias a ello, se han organizado grandes torneos internacionales, como el renombrado PokerStars Championship de 2017. La tercera razón es cultural. Panamá es un país de juego, con gente que disfruta de esta actividad. Eso se traduce en una regulación amigable con los operadores, lo que favorece la libre competencia y mejora la oferta al cliente.
¿Cómo estás trabajando para que el poker room regrese con fuerza después de la pandemia?
La pandemia ha sido un auténtico terremoto que marcará un antes y un después en el poker presencial. Lamentablemente, algunos operadores tendrán que cerrar operaciones y otros deberán reinventarse. Cuando se den las condiciones adecuadas, trabajaremos en canales y estrategias de marketing para conseguir que los clientes vuelvan a jugar, como promociones en redes sociales, bonos, freerolls, high-hands, jackpots, colaboraciones publicitarias con empresas, regalos para clientes regulares, paquetes de fin de semana y más. Iremos probando diferentes ideas y se evaluará la eficacidad de cada una. En cuanto a los protocolos, se aplicarán todas las medidas solicitadas por el ente regulador y el establecimiento. Habrá separadores entre los jugadores, toma de temperatura en el ingreso a la sala, varios espacios con alcohol en gel, uso obligatorio de tapabocas (además de máscaras adicionales dentro de la sala), y registro por escrito con dirección y número de teléfono de los jugadores. Con el personal, se tomarán las mismas medidas y se evaluará tener un visor protector.
El virus potenció el poker online. ¿Qué futuro le ves a esta modalidad?
Con la pandemia, el poker online muestra un buen presente y anticipa un mejor futuro. El porcentaje de dinero que dedicará el cliente a las plataformas seguirá subiendo. Además, con la digitalización del dinero y de los canales publicitarios, esta tendencia se incrementará. En cuanto al poker presencial, es el mejor catalizador de la socialización. Todos queremos conocer gente nueva, hablar, intercambiar experiencias y pasar un buen momento en un ambiente agradable. Incluso más ahora, que nos hemos alejado tanto y se ha perdido el factor humano. Asimismo, para los profesionales o regulares del poker, ofrece un entorno menos competitivo y donde se puede ganar más dinero por mano. En el corto plazo, el poker presencial va a sufrir. La vuelta será lenta y progresiva, pero esto debe servir para hacer una necesaria autocrítica y esforzarnos por mejorar. Es por eso que me parece esencial que los casinos se modernicen y adapten a los nuevos tiempos. Sin dudas, el casino tiene que convertirse en un espacio global de esparcimiento, con el juego como sólo una parte del negocio. Muchos ya se están enfocando en esta estrategia.
¿Notas que la juventud se sigue sumando al poker? ¿Por qué?
Sí, la juventud se suma al poker, pero estamos en una época post-boom del No Limit Texas Hold’em. A la vez, han surgido otras opciones de entretenimiento para las nuevas generaciones, como los Esports y el juego online, que atraen exactamente al mismo público que hace diez años hubiese elegido el poker. Sin embargo, el poker seguirá vivo y siempre se irá renovando. Las empresas del sector tendrán que ir adaptándose a estos nuevos públicos. En cuanto a los jóvenes, el juego los atrae por diversión, competitividad e hilo conductor para socializar. Para los que se lo toman más en serio, vende un sueño similar al del emprendedor, tan glorificado en nuestros tiempos. Los Millennials y Centennials ya no pensamos en jefes o en trabajar treinta años en la misma compañía. Nosotros preferimos la libertad, viajar, descubrir y dedicar nuestro tiempo a lo que nos gusta.
¿Qué consejo le darías a alguien que quiere incursionar en el poker?
Que juegue por la gloria y trabaje muy duro para retirarse joven. En caso de que no esté convencido de eso, recomiendo no tomar el camino de la profesionalidad. Estudiando en la universidad y con mucho menos trabajo duro y estrés, conseguirás los mismos objetivos económicos. El poker se ha convertido en un juego con un entorno ultra competitivo. Los márgenes se van reduciendo; requiere dedicación plena y muchas horas de estudio, sacrificio, paciencia y falta de aceptación por los demás. Por otro lado, si entras en el poker como hobby, simplemente, hay que disfrutarlo.