Por Camila Azimonti, periodista y entrevistadora de G&M News.
Sandra Edith Salazar dispone de una muy sólida formación educativa. Cuenta con un Master en Desarrollo Organizacional y Dirección de Negocios, Certificación en Procesos, Certificación como HRBP, Certificación en HAY Group (Diseño de estructuras organizacionales), y también una Licenciatura en Psicología Organizacional. Vive en Monterrey, México, y desde hace seis años que trabaja en el operador mexicano Logrand Entertainment Group. Actualmente, cumple funciones como Socia Estratégica de Recursos Humanos (HRBP) para Negocios del Juego Presencial y Diseño Organizacional. La ejecutiva considera que ha logrado contribuir a la consolidación de la estructura organizacional de la empresa, así como al rediseño de los modelos operativos, garantizando rentabilidad, agilidad y ahorros. Su llegada al mundo del juego se dio después de importantes desempeños en firmas de otras industrias, como Grupo Soriana y FEMSA.
Piensa que el gaming es un negocio noble y muy dinámico, en el que se sintió reflejada. “Se parece a mí porque es rompe esquemas tradicionales. Yo tengo un espíritu disruptivo, renovador. Ahora, en México, esta industria me ha dado la oportunidad de hacerlo”, dice. En ese sentido, agradece el poder tener la libertad de analizar, crear y proponer modelos de operación para las salas de juego del Grupo. “Durante estos años, me he permitido estudiar la industria, e ir de la mano de los expertos que operan y dirigen nuestras salas. He podido enfocarme en los diversos productos que se ofrecen, las acciones comerciales, el mercado y el vínculo con nuestros clientes. Comprendí que es clave ajustar los diversos procesos de Capital Humano a las necesidades tan particulares de este sector”, sostiene.
MUJERES LÍDERES QUE CAMBIEN PARADIGMAS
Precisamente, en torno a las respuestas de las personas frente a los desafíos, piensa que no hay razón para que las competencias y habilidades de hombres y mujeres no se midan con la misma vara. Acerca de este tema y la situación de la industria, expresa: “Hoy por hoy, se abre más el camino para que las mujeres podamos estar en mesas de toma de decisión, mejorando la experiencia de los clientes, evolucionando los modelos operativos, de gestión y de negocio, y siendo líderes positivas que transforman los procesos del sector”.
De todas formas, sabe que, para las mujeres, el camino no ha sido fácil. Aun así, cree que vale la pena recorrerlo. “Hay que jugársela, conocer tus cartas y ver cuál será la ganadora. En lo personal, recomendaría que estas cartas fueran: estar al tanto de la competencia, de tus clientes, de los modelos de operación y de los sponsors que posicionarán tus propuestas. Debes dominar el idioma de la industria. Es importante entender el ambiente y todas sus aristas para alcanzar un desarrollo óptimo del desempeño laboral. Es lo que permite establecerse y seguir creciendo como profesional”, manifiesta, convencida de sus ideales.
Profundizando esa mirada, señala que la industria del entretenimiento necesita mujeres líderes con espíritu disruptivo que rompan con el statu quo y propongan mejores prácticas. Así, invita a todas las mujeres del juego a ser partícipes del cambio, a generar ideas innovadoras, desintegrar los paradigmas impuestos y crear nuevos modelos que sumen al crecimiento del sector, además de producir un aporte positivo en la sociedad.
SER, HACER Y TENER
Es evidente que el gaming tiene un perfil muy absorbente, que exige una constante actualización sobre las nuevas herramientas y la necesidad de generar aportes por parte de sus integrantes. Ese esfuerzo necesita de una pausa que ayude a balancear lo laboral y lo personal. Al respecto, Salazar afirma: “Hay que visualizar los diversos escenarios que conforman a un ser humano. Cuando llego a mi trabajo, ejerzo mi rol de mujer profesional que busca cumplir con las metas y ayudar al progreso de la industria. Pero cuando estoy con mi familia o fuera del trabajo, soy Sandra: hija, hermana, tía o la mujer que se cuida, se divierte con sus amigos/as o se dedica a sus hobbies. Mi fórmula es respetar estos límites y siempre poder dar respuesta a la pregunta: ‘¿Para qué estoy haciendo esto?’. Considero esencial entender el orden de las cosas: ser, hacer y tener”.
Entonces, menciona que son varias las actividades que encuentra para poder pasar buenos momentos: viajar, conocer y descubrir pueblos alejados; participar en festivales de música electrónica y visitar galerías de arte para analizar pinturas desde una perspectiva psicológica. También es fan de la fotografía, la lectura y la investigación en temas médicos e industriales.
LIDERAZGO Y RENOVACIÓN
A la hora de autodefinirse, reconoce ser una mujer joven, que da pasos firmes. Son valores que busca transmitir a sus tres sobrinos, inspirarlos a aprender y crecer con proyectos en mente. El resto de su familia se compone de dos hermanas, un hermano y sus padres. Sobre la mirada ajena de su persona, cuenta: “Mis diversos jefes, compañeros de trabajo, colaboradores y familiares siempre me han considerado como una mujer que rompe el molde, inteligente y empática, alguien disruptiva, con una visión holística e interesada en avanzar”. Asimismo, describe que su entorno laboral la distingue como una líder nata, alguien que posee un alto sentido de la ética y la perseverancia; una mujer diligente y que jamás se rinde, además de ser una gran vendedora.
Con respecto a sus futuros proyectos, desde lo personal, Sandra comparte: “En mis planes de vida, está el formar una familia, seguir conociendo más países, continuar incrementando mi patrimonio. Quiero disfrutar cada momento que la vida me regale con mi familia y amistades, generando nuevas vivencias y experiencias”. En cuanto a lo profesional, postula: “Deseo consolidarme como ejecutiva, fundar una consultoría enfocada en los modelos organizaciones de la industria del entretenimiento, expandir mi espíritu transformador no sólo a un grupo, sino a varios, y poder participar activamente en proyectos renovadores en Estados Unidos y Europa”.
En una línea
Un libro: “Las 48 leyes del poder” (Robert Greene, 1998)
Una película: “El discurso del rey” (Tom Hooper, 2010)
Música preferida: electrónica (house) y jazz
Un perfume: Chance, by Chanel
Un lugar para vivir: Bruselas, Bélgica
Un lugar para veranear: Ibiza, España
Un lugar para comer: Le Jules Verne (en el segundo piso de la Torre Eiffel), en París, Francia
Una comida: ensalada César con jamón serrano
Una bebida: el cocktail Boulevardier
Un deporte: fútbol (¡arriba los Tigres de Nuevo León!)
Un/a maestro/a: dos: Raúl Sueiro, COO de Logrand, y mi papá, Arturo Salazar