Por H. B. Ducasse, analista.
¿Puede la tecnología del Bitcoin crear mejores y más seguras experiencias de juego? ¿Podrá finalmente algún sistema de criptomonedas basado en blockchain reemplazar al dinero físico? ¿Qué tan grande es el desafío tecnológico presente en otras aplicaciones de blockchain? ¿Qué opinan los operadores? ¿Qué trabas de regulación aparecen en el horizonte? ¿Bitcoin es la mejor moneda para el juego? Algunas de estas preguntas fueron abordadas por uno de los paneles más destacados de la reciente CoinGeek Live, una experiencia virtual en tiempo real, transmitida en vivo desde dos estudios en New York y Londres. Con más de 90 oradores en 3 días, esta reunión global analizó la actualidad del ecosistema mundial de Bitcoin SV y permitió aprender sobre las novedades y expectativas para los próximos años.
El panel al que me refiero se tituló ‘El futuro del iGaming: Cómo el Bitcoin de blockchain puede impulsar la eficiencia y transparencia de los procesos en la cadena de valor de la industria’. Moderado por Nick Hill, Director de Premier Consulting, participaron cinco oradores de lujo: Phillip Runyan (CEO de Hold Gaming); Alex Shore (CTO y Cofundador de BitBoss); Lloyd Purser (COO de FunFair Technologies); Sam Brown (COO de Hero Gaming), y Carl Brincat (Chief Legal & Enforcement Officer de la Malta Gaming Authority, MGA). Todas estas voces se unieron para ofrecer diversas perspectivas acerca del rol del blockchain y su presencia cada vez más fuerte e importante en el sector del juego. Aquí tomaremos en cuenta algunos pasajes de la charla, reflejada por el sitio Calvinayre.com.
DISTINTAS MIRADAS PARA UNA HERRAMIENTA FUNCIONAL
Shore abrió la conversación señalando que blockchain es una herramienta a tener en cuenta, pero no la única. “En las plataformas de iGaming, blockchain debería ser un tecnología a comparar con otras para pensar cómo se pueden construir formatos más rentables y eficientes”, dijo. Elogió los recursos de una blockchain pública como Bitcoin SV, que puede convertirse en una mejor solución de red de datos para los operadores gracias a sus controles inherentes de seguridad y privacidad. De inmediato, Purser redobló la apuesta y sostuvo que el sistema es mejor para todos: jugadores, operadores, afiliados o reguladores. Apuntó a la transparencia y al seguimiento de auditoría del medio, y vaticinó que pronto superará a otras tecnologías disponibles. Por su lado, Runyan estuvo de acuerdo con el impulso general del blockchain al reafirmar que reduce los costos de infraestructura para los operadores. La tecnología valida la equidad en los juegos P2P, asegurando un campo de juego justo y nivelado. Al mismo tiempo, BSV también minimiza los costos de KYC, AML y otros procesos de incorporación, lo que ayuda a los operadores a responder a los requisitos de cumplimiento más fácilmente.
En representación del regulador de Malta, Brincat reconoció los beneficios cuando se trata de la equidad para el jugador, los pagos automatizados y la protección del usuario. Pero advirtió que era necesario adherir a ciertos requisitos reglamentarios, como las normas de blanqueo de capitales. “Si una transacción suscita sospechas, hay que informar esa sospecha. La tecnología debe tener la capacidad de congelar esa transacción si hay un reclamo válido”, advirtió. Aquí volvió a exponer Runyan, quien celebró que los reguladores estén al tanto de este problema. “En cuanto a la regulación, siempre vamos a estar por delante. Se necesita alguien que trabaje junto con los reguladores, con los operadores. Al final del día, no evolucionan o lo hacen a una velocidad glacial. No habrá innovación si no los ayudamos”, remarcó.
Como llegaba el turno de los operadores, Hill le preguntó a Brown cuáles eran para ellos las ventajas de trabaja con blockchain. “Un flujo inmediato, libre y transparente de pagos y contratos inteligentes, y permitir que se pague a la gente. Para tener éxito, necesitarías pagar por volumen. Si pudieras devolver inmediatamente el dinero a tus afiliados, ellos tendrían más flujo de dinero para generar más tráfico, y nosotros conseguiríamos más jugadores. Si los proveedores de juegos están obteniendo flujos de dinero rápidos y predecibles en sus negocios, sin basarse en un gran ganador a fin de mes, entonces los estudios de juegos más pequeños podrán invertir más eficazmente”, respondió con claridad.
NECESIDAD DE ADOPCIÓN MASIVA EN EL GAMING
Durante la charla, quedó evidenciada la enorme utilidad de esta tecnología, por lo cual la gran duda sigue siendo por qué no se implementa masivamente en la comunidad del iGaming. Purser sostuvo: “La adopción es la clave”, señalando que una vez que se pueda probar la tracción, las fichas de dominó caerán por sí solas. Brown fue más cauteloso e indicó que todavía hay aspectos complejos, con un cambio que puede ser duro y arriesgado. Brincat recogió el guante y pidió que los operadores hagan más para educar a los reguladores. “Las personas involucradas en la industria, que emplean esta tecnología a diario, cuentan con más información, por lo que hay que incrementar esa comunicación para toda la industria”, demandó. Mientras que Shore sugirió que el blockchain necesita llegar a un punto tal en el que la gente confíe de manera habitual en este sistema. Eso allanará el camino para involucrar a los reguladores. En tanto que Runyan devolvió la pelota. Para él, los reguladores tienen que estar al frente de la conversación. “Los operadores no se arriesgarán con esta tecnología a menos que los reguladores den luz verde”, puntualizó.
Si bien el Bitcoin y otras criptomonedas se usan como medio de pago en distintos casinos, el desafío es redoblar la apuesta e incorporar blockchain como herramienta de transparencia, seguridad y privacidad. Por cierto, decimos Bitcoin porque es una de las más famosas criptomonedas y muchos sistemas se montan sobre ella, pero también hay plataformas como Trueplay.io, que se basa en la blockchain de Ethereum y que se usa para los contratos inteligentes. Como vemos, blockchain es una tecnología que avanza en varios frentes. Su adopción más extensa en el juego dependerá de una suma de factores, incluyendo regulaciones más estrictas, mayor información hacia el interior y exterior de la industria y casos exitosos que muestren con practicidad todos esos beneficios aquí mencionados.