Por Alejandro Caminos, periodista, guionista y colaborador de G&M News.
El croupier mezcla un mazo completo de cartas y las reparte a cada jugador que está presente en la mesa. Se sabe que el poker es un juego de habilidad. Ahora bien, ¿qué tanto incide la suerte en este célebre pasatiempo? ¿Cómo se puede medir objetivamente la suerte? En Alemania, la Universidad de Heidelberg llevó este eterno debate a un nuevo nivel luego de publicar un artículo en la revista académica European Economic Review.
Es importante señalar que, en la propia Alemania, el poker es considerado legalmente como un ‘juego de azar’, categoría que fue dictaminada por los tribunales a través de un fallo judicial allá por 1906. Un criterio de evaluación para estos casos, que se utiliza con frecuencia, implica determinar si el resultado de la apuesta de un jugador depende en más del 50% de la suerte. En su estudio sobre la Teoría de Juegos, los investigadores utilizaron datos de más de 4 millones de juegos en línea de ajedrez, poker y skat. También desarrollaron un sistema de calificación basado en el método Elo para el ajedrez, con el cual se calculan los niveles de habilidad relativos de los jugadores en forma individual.
El Dr. Peter Dürsch, una de las cabezas de la investigación, explicó: “Debido a que el ajedrez es puramente un juego de habilidad, la distribución de calificaciones es muy amplia, desde 1.000 para un novato hasta más de 2.800 para el actual campeón mundial. Por lo tanto, cuanto más amplia sea la distribución, más importante será la habilidad”.
METODOLOGÍA Y DESCUBRIMIENTO
El resultado arrojó que, en gran parte de las partidas de ajedrez, la calificación del sistema Elo variaba en forma gigantesca. Esto demostró que había una enorme disparidad de habilidad entre los recién iniciados y aquellos que son expertos. Por el lado del poker, la situación fue completamente distinta y mucho más estrecha, ya que se evidenció que los distintos niveles de habilidad no variaban de la misma manera. Mientras que la desviación estándar o promedio para el ajedrez es superior a 170, los otros dos juegos (poker y skat) no excedieron los 30 puntos. “Ambos caen por debajo del nivel de habilidad del 50 por ciento y, por lo tanto, dependen principalmente de la suerte”, sentenció Marco Lambrecht, otro de los representantes del estudio germano.
Sin embargo, no todo es desalentador para aquellos que gustan del poker y están dando sus primeros pasos. El análisis también verificó que, después de un total de cien juegos, un player de poker que tiene una clasificación Elo más alta que su oponente posee un 75% más de probabilidades de haber ganado más partidas que su rival en el pasado. Así, la habilidad prevalece en el largo plazo y aumentan las chances de resultar vencedor.
OTRO INTERESANTE ESTUDIO
Hay que recordar que no es la primera vez que se hace un estudio bajo esta premisa. En 2013, investigadores de la Universidad de Bremen (también en la rigurosa Alemania) concluyeron que el azar y la fortuna determinan la mano de cartas de los vencedores y no así sus habilidades individuales. Para llegar a este deducción, convocaron a jugadores de poker, y los segmentaron entre ‘buenos’ y ‘malos’, según su nivel. De esta forma, se los enfrentó bajo la modalidad Texas Hold’em, con manos previamente escogidas. El resultado final mostró que los jugadores expertos o ‘buenos’ no habían superado a los aficionados promedio o ‘malos en cuanto a las ganancias totales. Incluso, se advirtió que sólo la destreza era importante para reducir las pérdidas al momento de obtener una mala mano. Sin dudas, esta discusión está muy lejos de cerrarse. Mientras tanto, cada vez más personas se vuelcan al poker online en todo el mundo. En la mesa o en la pantalla, las cartas están servidas. Que gane el mejor.