Por Nahuel Díaz, periodista y colaborador de G&M News.
¿Cuál es la evaluación que hacen desde ALEA de la Tecnicatura en Gestión y Administración de Juegos de Azar y la relevancia de este proceso de formación profesional dentro del sector?
Es un trabajo que se desarrolló durante más de cinco años. Surgió de una necesidad que teníamos de una formación más profesional a los empleados y funcionarios de las distintas loterías, dado que se trata de una actividad muy particular, que no es comparable con ninguna otra. Entonces, una de las principales funciones de las asociaciones es la formación y capacitación del personal de loterías. Si bien esto lo veníamos haciendo con congresos y seminarios, veíamos que había una necesidad más grande de formación, con funcionarios con gran experiencia, pero que no la estaban transmitiendo a las nuevas generaciones. Así, nos vinculamos con un aliado estratégico, como la Universidad Provincial de la Administración Pública (UPAP) de Salta, que tiene un modelo de educación adaptativo, que servía a nuestros fines de establecer módulos de capacitación. Empezamos a trabajar con ellos en el desarrollo de la tecnicatura, que comenzó oficialmente hace cuatro años. Después de tres años de cursada, ya se recibieron los primeros 25 técnicos. Actualmente, hay 123 alumnos: 45 estuvieron en primer año y pasarán a segundo, y 78 de segundo cursarán tercero en 2022. La verdad es que estamos muy contentos porque se han cumplido las metas y los parámetros de lo que buscábamos. Incluso, está abierto el registro de preinscripciones para el ciclo 2022.
¿Por qué decidieron lanzar el Código de Buenas Prácticas para la Publicidad Responsable de Juegos de Azar Online en Argentina? ¿Qué repercusiones tuvo en la industria?
Las repercusiones fueron buenas porque hay una mayoría de loterías que ha adherido. Es un proyecto que ha seguido un lineamiento en base a guías de loterías europeas, que tienen desarrollado bastante lo que es el juego online. Así, pensamos el Código como un aporte de la asociación a aquellas loterías argentinas que empiezan a incursionar en el iGaming. Entonces, fijamos parámetros de cómo debe ser la publicidad, siempre buscando la protección del publico apostador. Es el mismo esquema que utilizamos a la hora de diseñar una guía para que las loterías explotaran y comercializaran sus productos de manera responsable.
¿Cómo ve en la actualidad la recuperación del juego presencial en Argentina luego de las restricciones por la pandemia, y la expansión de la regulación del juego online en distintas provincias?
Como en toda actividad económica, la pandemia impactó muy fuertemente al sector del juego, ya fuera en las loterías oficiales, las salas propias o concesionadas y las salas de juego en general. Recién ahora se nota una lenta recuperación económica, con más gente asistiendo a las salas, a pesar de que hace bastante tiempo que hay movilidad y presencialidad. Fueron años muy complicados. En paralelo, la pandemia llevó a tomar conciencia sobre la necesidad de la regulación y explotación del juego online de manera oficial, situación que venía postergándose por distintas razones. Había que tomar pasos con decisión a fin de evitar que los apostadores siguieran perjudicándose frente al ofrecimiento masivo de sitios y lugares de dudoso origen. Venimos trabajando fuerte para comunicar y clarificar, a fin de que las personas puedan elegir el juego legal y sepan diferenciarlo del clandestino.
¿Qué impulso dará al sector el comienzo de las operaciones de juego online en la Provincia y en la Ciudad de Buenos Aires?
Me parece que el juego online en las dos jurisdicciones viene a ocupar un lugar que no estaba siendo explotado oficialmente, sino que aprovechaban empresas extranjeras sin ningún control ni fiscalización. El avance de las apuestas online (en especial, entre el público joven) llevó a un proceso en estos tres últimos años, que culminó con nuevas operaciones de esta modalidad en ambos territorios. La aceptación del juego online oficial es un proceso natural que va a llegar a toda la Argentina. El público apostador de las agencias no se renueva y la gente joven busca otras maneras de entretenerse a través del celular o la computadora. Así, se cubre ese espacio de manera legal y responsable.
¿Cómo han llevado adelante los miembros de ALEA un trabajo continuo en torno a la promoción de la lucha contra el juego ilegal y el refuerzo de acciones y políticas de Responsabilidad Social?
Desde ALEA, hace años que hay grupos de trabajo en estas áreas, al igual que en otras. Somos el marco de trabajo donde confluyen funcionarios de todas las loterías del país. Dentro de la asociación, hay distintos grupos en diversas materias: cuestiones legales, comerciales, administrativas y tecnológicas. En los últimos años, se ha dado aún más importancia al área de responsabilidad social y a la de prevención del juego ilegal. Casi el 90% del país tiene proyectos o programas de promoción del juego responsable y prevención del juego problemático, con medidas de protección al público apostador y sistemas que evitan que los menores accedan al juego. Venimos trabajando y coordinando muchos programas. Es un trabajo grande que encaramos con mucha seriedad y compromiso.
Estamos en el último mes del año. ¿Cuál es el balance de ALEA de su gestión en 2021?
A pesar de la difícil situación que nos tocó atravesar, por la reducción o cierre de operaciones de la mayoría de las loterías, desde ALEA, supimos continuar trabajando y manteniendo activa a la entidad y a sus miembros. Quiero resaltar, entonces, cómo, en forma mancomunada, hemos salido adelante en un montón de cuestiones. El esfuerzo no ha sido sólo de un pequeño grupo de personas, sino de todos los que hacen ALEA, todos y cada uno de los dirigentes que participan de las distintas loterías del país.