Por Alejandro Caminos, periodista, guionista y colaborador de G&M News.
La historia grande de los videojuegos terminó un nuevo capítulo de un vasto libro con la culminación del ya legendario Pro Evolution Soccer (PES). Es que la desarrolladora Konami anunció que dará punto final a su título de fútbol, ofreciendo en su lugar al mercado un nuevo producto para distintas plataformas.
¿De qué trata eFootball? En principio, el producto mantendrá su idea de caracterizar al fútbol. Por otro lado, uno de los mayores cambios es que será un título netamente free-to-play, con lo cual cualquier jugador podrá descargarlo en forma gratuita. Además, tendrá crossplay, será en formato digital y podrá jugarse desde las consolas de última generación, como PlayStation 5 y Xbox Series X/S. Además, se podrá disfrutar desde la PC y los teléfonos móviles, gracias a la experiencia obtenida y los buenos resultados con PES Mobile. Otro rasgo que se mantendrá es aquel que destacó al PES desde siempre: la posibilidad de crear un club, incorporar a nuestros jugadores favoritos, armar un plantel de ensueño y llevar a esa institución a la gloria virtual a través del modo Liga Master. Si bien el juego no tendrá precio de venta, sí contará con microtransacciones incorporadas, entre ellas, distintos DLCs o formas de juego, como partidos offline.
MÁS RÁPIDO Y MEJOR
Según comunicó la empresa japonesa: “Todo comenzó con la determinación implacable de crear una experiencia futbolística revolucionaria. Nuestra ambición era reproducir el ambiente de fútbol perfecto, desde el césped en el campo hasta el movimiento de los jugadores y la multitud en el estadio. El resultado final fue aún más impresionante de lo que habíamos concebido originalmente. Habíamos ido más allá de la frontera de PES, hacia un nuevo reino de fútbol virtual”.
De esta forma, nació eFootball, el nuevo proyecto de Konami. “Hace dos años que comenzamos a planificar este renacimiento para que coincidiera con la transición de la generación de consolas y con los cambios en el entorno del mercado”, contó Seitaro Kimura, productor de PES. En cuanto al motor del juego, se basará en el poderoso Unreal Engine 4 de Epic Games, que ya lo tienen incorporado títulos conocidos, como Conan Exiles, Days Gone, Dragon Ball FighterZ y Fortnite, entre muchos otros. “La velocidad de desarrollo de Unreal Engine es una de las más rápidas entre los motores de juegos. Su escalabilidad incluye tanto la gama alta como la gama baja, lo cual la hace perfecta para plataformas móviles y de nueva generación”, agregó Kimura.
HISTORIA Y PASIÓN LATINOAMERICANA
En 2001, PES (conocido como World Soccer: Winning Eleven 5 en Japón) empezó a escribir parte de la historia grande del fútbol virtual, tanto en la consola PlayStation como en la PlayStation 2. Al ser tan nuevo, apenas tenía licencias de algunos clubes, como Barcelona de España, Chelsea de Inglaterra o el Mónaco francés. En ese comienzo, Latinoamérica estuvo representada por Río de Janeiro (Vasco Da Gama), Palestora (Palmeiras), La Plata (River Plate) y Buenos Aires (Boca Juniors). Para 2009, Konami había logrado afianzar su producto, que le jugaba el partido de igual a igual al FIFA de Electronic Arts (EA Sports), dividiendo la pasión para los fanáticos futboleros de todo el mundo. Ese mismo año, PES introdujo la modalidad Selecciones Clásicas, en la que el player podía desbloquear distintos equipos representativos de cada país, con sus jugadores históricos. Un caso emblemático fue el de “Malgani”, la encarnación virtual de Diego Armando Maradona, que capitaneaba a la Argentina Clásica.
Por otro lado, el título también ingresó en la cultura popular de muchos países latinoamericanos. Durante varios años, fue recurrente la representación de “jugar unos Winning” como símbolo de amistad y de juntadas entre amigos. Se trata de una influencia palpable en LatAm hasta el día de hoy. En especial, el vínculo se expandió en Perú, donde PES cuenta con una enorme comunidad. Como siempre, el transcurso del tiempo y el interés de los jugadores determinarán si el nuevo eFootball es digno del legado que PES acaba de dejar, uno que ya está escrito con letras de fuego en el libro de la historia grande de los videojuegos.